El domingo 5 de octubre vivimos un momento muy especial en la ciudad de Talavera de la Reina. Participamos activamente en el preestreno del documental Homo Plastic, dentro de la XII edición de los Premios Pávez. Fue algo más que cine: fue compromiso, voz, encuentro y esperanza.
Desde las 12:00 h en el Teatro Victoria, con entrada libre previa reserva, proyectamos esta obra que no solo quería mostrar imágenes impactantes, sino generar conciencia y abrir un diálogo profundo sobre el mundo que estamos construyendo.
Homo Plastic: un retrato comprometido con el planeta
Dirigido por Julio Pérez del Campo (Talavera de la Reina), Homo Plastic exploró cómo el plástico —en sus versiones micro y nano— ha ido dejando una huella devastadora en ecosistemas muy vulnerables del planeta. Desde las costas de Hong Kong hasta las tierras más remotas de la Antártida, la cinta articuló un relato visual poderoso: el progreso material acompañado de destrucción ambiental. Además, el documental contó con la narración del paleontólogo de renombre internacional y Premio Príncipe de Asturias, Juan Luis Arsuaga, quien aportó una mirada científica sensible al relato.
Un coloquio con voces que inspiran
Tras la proyección, el Teatro Victoria se transformó en escenario de reflexión y emoción. Nos acompañaron:
- Julio Pérez del Campo, que compartió los entresijos del rodaje, las motivaciones, los desafíos y las anécdotas que hicieron posible Homo Plastic.
- Juan Luis Arsuaga, que dialogó sobre cómo la ciencia y la denuncia medioambiental pueden converger en el lenguaje audiovisual.
- Nacho Timón (de la asociación Verdébora y de Esparvel), que aportó la óptica del activismo y de la música como clave de esperanza.
- Marcos Vázquez Bravo (13 años, en representación de Esparvel), nuestra voz joven, símbolo de futuro, tomando el pulso de lo que realmente nos jugamos.
El coloquio estuvo moderado por nuestro compañero Miguel Ruiz, también socio de Verdébora y de Esparvel.
Fue un espacio de encuentro donde escuchamos, compartimos y construimos juntos.
En Esparvel, nos movía la ilusión de actuar, de poner nuestras manos y esperanza en este relato. Fue una oportunidad para formar parte de algo mayor. Porque el cine no solo mira: también transforma.
Te esperamos en la próxima. Gracias por acompañarnos.






